Organizaciones Benéficas
Las organizaciones benéficas provienen del sector del voluntariado. Estas se financian directa e indirectamente con 'dinero público', a través de los impuestos, las cuotas de sus socios, las donaciones y convenciones. Sin embargo, muchas veces se engaña al público con respecto a lo que verdaderamente están financiando estas organizaciones. Por este motivo, cada vez hay más gente que piensa que la 'Ley sobre la libertad de información' debería incluir al sector del voluntariado. El siguiente ejemplo demuestra por qué son esenciales una mayor claridad y transparencia
Las huchas para colecta de la asociación "Marie Curie Cancer Care" se encuentran en determinados establecimientos. En sus etiquetas no se hace referencia alguna a la investigación. Sin embargo, "Marie Curie Cancer Care" es miembro de la Association of Medical Research Charities (AMRC) (Asociación de Entidades Benéficas para la Investigación Médica) y gestiona un instituto de investigación propio. Después de escribir a uno de estos establecimientos, un miembro de la NMRM fue informado de que el dinero recaudado de sus clientes se utilizaba para financiar gastos de enfermería, y no para la investigación. Sin embargo, ninguno de los responsables de estos establecimientos quiso responder cuando se les preguntó si el uso de este dinero, recaudado por ellos y confiado a ellos por sus clientes, estaba realmente limitado a los gastos de enfermería, y si esto se tenía por escrito.
La vivisección es una cuestión controvertida, y por ello muchas de las organizaciones benéficas que la financian, evitan cualquier referencia a la investigación en sus huchas. Las empresas que prestan su apoyo a estas entidades benéficas, especialmente si tienen huchas recaudatorias en sus locales, deberían estar obligadas por ley a ser claras en este punto, y a no confundir a sus clientes.
La mayor parte de las entidades benéficas dedicadas a la investigación a través de la vivisección, son extremadamente ricas. Por ejemplo, antes de empezar a operar como 'Cancer Research UK (CRUK)', la Imperial Cancer Research Fund (Fondo Imperial para la Investigación contra el Cáncer) y la Cancer Research Campaign (Campaña para la Investigación contra el Cáncer) juntaban entre las dos 170 años de recaudación de fondos. Estas organizaciones benéficas se han convertido en expertos en hacer marketing explotando la culpabilidad y el miedo de la gente. El miedo generalizado les ha garantizado un flujo continuo y masivo de fondos para la investigación. Según Diana Garnham, que fue directora general de la Association of Medical Research Charities (ARMC), y es ahora directora general del Science Council:
"Incluso The Sun da cobertura permanente a la investigación. Están siempre hablando en términos de grandes avances, y aunque esto resulta ingenuo, se publica. La gente lo capta y quiere dar dinero. Si se dice que se está a punto de identificar un gen, el dinero llega. Miren cómo las enfermedades hereditarias raras han conectado con la imaginación del publico..."
Algunas asociaciones benéficas, con nombres aparentemente inocentes, financian la vivisección directa o indirectamente (entre estas se incluyen 'Help de Aged' y 'Age Concern' (Age UK)). Sin embargo, la mayor parte de la gente que da dinero a estas asociaciones, piensa que sus donaciones se dedican a dar calor y cuidados a los pobres y ancianos de nuestra sociedad.
La vivisección no es más que un fraude científico. Cualquiera que quiera evitar contribuir a su financiación, pero que quiera dar su apoyo a una buena causa, debería escribir a la entidad benéfica elegida, preguntando si dicha entidad financia la investigación ya sea directa o indirectamente. Por razones obvias, es preferible obtener una respuesta por escrito. Las personas con acceso a Internet pueden obtener más información sobre las distintas asociaciones, ya que algunas de estas admiten en sus páginas web que financian la investigación. En algunos casos sin embargo, será necesario hacer una búsqueda exhaustiva hasta encontrar dicho término.
En cuanto a las organizaciones benéficas que declaran estar financiando 'alternativas', tal y como indicábamos en el apartado relativo al Cáncer, en la sección de las Enfermedades más Publicadas, los viviseccionistas generalmente apoyan la idea de reemplazar y redefinir, sabiendo que esto les permitirá continuar con su experimentación animal sin obstáculos, mientras dan las impresión de estar buscando 'soluciones alternativas'. La situación se pone de manifiesto en el siguiente pasaje:
"La mayor parte de los métodos alternativos están basados no en auténticos métodos científicos, como el cultivo de células y tejidos humanos, o la investigación clínica con pacientes humanos, sino más bien en el cultivo de células y tejidos animales. Por ello, para llevar a cabo la llamada validación de los métodos alternativos (un proceso que lleva años en el caso de que llegue a completarse) los investigadores no sólo comparan los datos de sus métodos alternativos con los datos de experimentación animal, sino que ¡también repiten los experimentos animales que supuestamente quieren reemplazar, con el fin de obtener datos adicionales para futuras comparaciones! Esta interminable y absurda repetición de los experimentos con animales a lo largo de un determinado periodo de tiempo (a pesar de la ingente cantidad de datos provenientes de décadas de ensayos previos en animales) no conduce ni a la reducción ni al reemplazo, sino más bien a la perpetración de experimentos con animales que causan perjuicios a la medicina y en consecuencia, al paciente."
Médicos y Abogados para una Medicina Responsable (DLRM, por sus siglas en inglés) - Ver nuestra página de Enlaces.
"Liberados de los errores de la vivisección, los investigadores futuros, podrán apoyar la investigación médica sobre bases genuinamente científicas, devolviendo poco a poco a la medicina la calidad científica que hoy en día le ha sido arrebatada por el error viviseccionista."
Prof. Pietro Croce, MD, Vivisection or Science (ver sección de libros).
Las organizaciones benéficas dedicadas a la vivisección intentan justificarse continuamente diciendo que la experimentación animal es legal, sin embargo esto último no está expresado en ninguna ley (ver nuestra página de inicio).